sábado, 11 de enero de 2003

“Todos perdimos poder”

Aunque aún tiene contrato por un año más en los Estados Unidos, Domingo Cavallo (56) volvió a Buenos Aires para pasar el fin de año. Aprovechó también para palpar cuál es la reacción que provoca, luego de irse tras los cacerolazos del 19 de diciembre de 2001. Está más tranquilo y casi no se enoja por nada. En su oficina de Barrio Parque hay poco movimiento. Se muestra distendido y hasta se permite usar palabras que suenan raro en su boca. Dirá que creer que Antonio de la Rúa influía en las decisiones de su padre “es una boludez”. Y que a las provincias no habría que haberles dado “un mango”. Noticias: ¿Porqué decidió volver? Domingo Cavallo: Yo no me he ido, así que tampoco necesito volver. Estoy enseñando en los Estados Unidos porque de algo tengo que vivir. Mi mente siempre ha estado en mi país, aún cuando la mayor parte de los periodistas reaccionó mal a mi decisión de publicar un artículo en “La Nación” en febrero del 2002. Pero voy a intensificar mi participación en la discusión de los temas públicos. Luego de participar en el gobierno de De la Rúa he tenido que disminuir la intensidad de mi presencia pública. Espero, desde el segundo semestre del año o desde el 2004, volver a tener participación muy activa. Noticias: ¿Cuánto cobra por sus clases en Nueva York? Cavallo: Mire, es un tema que no interesa. Alguna vez dije cuanto cobraba y se armó un lío tremendo. Hay periodistas que ganan mucho más que yo y nadie los cuestiona. Noticias: Cuando era funcionario, todos teníamos derecho a saber cuanto cobraba… y ahora está en su derecho de no decirlo. Cavallo: No voy a decirlo. Y si alguien lo quiere saber, que vaya a fin de año a ver mis declaraciones de impuestos.Noticias: El ex asesor de Menem, Emilio Perina, siempre decía que no había que pelearse con usted porque era uno de los hombres más ricos de la Argentina. “Sólo hay que calcular un dos por ciento de comisión en la renegociación de la deuda externa que renegoció Cavallo.”Cavallo: Mire, los menemistas han dicho tantas cosas sobre mí, que no merecen respuesta. Noticias: Ahora se queja de “la mayor parte de los periodistas”, pero antes buena parte de la prensa lo elogiaba, ¿se siente traicionado?Cavallo: En la segunda mitad del 2001 y principios del 2002, una parte del periodismo empujó al proceso de cesación de pagos y de pesificación y devaluación. Creo que fue en respuesta a intereses de los medios que representaban. Pensaban que esas medidas iban a permitirles resolver las dificultades financieras que tenían. Y cometieron un error muy grave. Yo sentí que eso repercutió en la forma en que trataron mis opiniones. Publiqué ese artículo en “La Nación”, y en la tevé, en la radio y otros medios salieron a criticarme. Pero no al contenido del artículo, sino diciendo que debería llamarme a silencio. Me privaban de mi derecho a expresarme.Noticias: ¿A qué medios se refiere?Cavallo: Todos los que controla el Grupo Clarín, claramente. Pero no sólo el diario, sino los medios que controla directamente, como la radio y la televisión.Noticias: ¿Habló con algunos de sus directivos o periodistas a raíz de esta percepción suya?Cavallo: Si, yo hablé con Héctor Magnetto, con el cual tengo una relación personal muy buena. Y me dice… (N. de la R: se tienta y debe hacer una pausa), je, je, me dijo que yo invento o que yo creo que hay una campaña, y él lo niega. Pero de hecho yo siento que es así.Noticias: ¿No es simplista culpar de sus desgracias al periodismo?Cavallo: No. Estoy convencido de que el radicalismo alfonsinista viene planeando que yo sea el chivo expiatorio de todos los problemas del país, desde que ingresé en el gobierno de De la Rúa. Ellos querían que todo se fuera al diablo con Cavallo administrando este sistema de los ’90. Yo lo percibía desde antes del 20 de diciembre. Pero ese día, cuando se gestaba la caída definitiva del gobierno, quisieron que yo me fuera del país y apareciera pidiendo asilo político. De esa forma iban a simbolizar, con mi “fuga” que yo aceptaba ser culpable de lo que había pasado. Pero la insistencia de que me tomara un avión para ir a Uruguay, combinado con otros rumores, me dio la pauta de que yo era el chivo expiatorio. Por supuesto, no caí en la trampa.Noticias: Tras la caída, usted pasó a ser un paria después de diez años de poder, ya sea como ministro o como opositor, ¿cómo sintió esa pérdida de poder?Cavallo: Creo que toda la dirigencia política ha perdido poder. Incluidos Duhalde y Alfonsín, quienes son los que pretenden conformar el actual gobierno. Y todos han perdido poder porque los resultados han sido muy malos para los argentinos. Y una persona como yo, que ha tenido un rol tan importante en la década del 90, es natural que haya quedado casi con nulo poder. Pero esto no es relevante. El poder que siempre me interesó tener es el poder para influir en la solución de los problemas argentinos. Ese poder, yo siento que lo voy a tener en el futuro…Noticias: Claro que depende de cómo lo tome la sociedad…Cavallo: El tema de la sociedad es importante si uno quiere tener poder a través de las ideas y que la sociedad sea receptiva a las ideas. Obviamente he sentido que la sociedad y sobre todo la que se deja intermediar por los medios no ha estado muy receptiva o ha estado muy poco receptiva a lo largo de este año para escuchar lo que tengo que decir, por eso me he replegado un poco.Noticias: Así como se lo castiga a usted, ahora está de moda ensalzar a Lavagna, ¿cuánto hay de mito y cuánto de realidad en la capacidad del ministro?Cavallo: Yo no soy quién para juzgar la gestión de Lavagna, a mí no me parece que él esté expresando ideas que vayan a ayudar a resolver el problema de los argentinos de una manera sostenida y permanente en el tiempo. Pero como alguna gente a mediados de año hizo pronósticos muy extremos, el Gobierno y Lavagna ven que las cosas al final no salieron tan mal como algunos pronosticaban. Yo creo que están aprovechando ese argumento muy bien y muchos medios, sin duda, los están ayudando a usar ese argumento, pero a mí me parece que este gobierno, me refiero al gobierno de Duhalde apoyado por Alfonsín en el cual Lavagna es ministro de Economía, no ha clarificado para nada lo que la Argentina quiere para el futuro…Noticias: ¿No lo exime el que sea un gobierno de transición? Cavallo: Pero uno tiene el poder que dan las ideas cuando tiene idead claras y las expresa, yo creo que en la Argentina ahora hay una tremenda confusión. Este gobierno y todos los que lo han apoyado se ocupan y procuran decir que las ideas de la década del 90 fueron todas equivocadas, un desastre, y que sólo sirvieron para empobrecer al país, para crear desocupación, para estafar a los que invirtieron en la Argentina, esa es la única idea que expresan. Ahora, cómo van a reemplazar las reglas de juego de los ’90 por un sistema de organización política, económica y social capaz de lograr mejores resultados, no lo han explicado, no lo van a explicar ni intentan explicarlo. A nivel propuestas o candidatos, no hay nadie que sea escuchado o que intente hacerse escuchar y logre adhesiones con un nuevo esquema de ideas alternativo a la década anterior.Noticias: Durante los ’90, López Murphy acompañó su gestión con elogios, ¿cómo lo ve a él como candidato? Cavallo: Creo que tiene ideas muy buenas, pero está teniendo dificultades para transmitirlas y lograr adhesiones. Espero que supere esas dificultades porque es un hombre que puede contribuir grandemente a que la Argentina encuentre un buen rumbo.